Aunque se trate de las lenguas más cultas, nunca les ha resultado fácil a
las lenguas naturales abordar los fenómenos artísticos, hablar acerca de las
obras de arte y de la labor de los artistas. Siempre se ha intentado buscar
dicotomías conceptuales que ayudasen en esa tarea. Me refiero a dicotomías como
materia/forma, forma/significado, belleza/fealdad, expresión/construcción,
verdad/ilusión, realidad/simulacro, y una infinidad más. Todas ellas tienen en ocasiones su utilidad y
todas resultan insuficientes. Pero no podemos prescindir de ellas porque son
las mejores herramientas de que disponemos para comprender y explicar el
arte. La obra de Toni Moranta puede
comprenderse, sin duda, con ayuda de muchas de dichas díadas conceptuales. Sin
embargo, creo que la que más puede ayudarnos a entender su singular
personalidad artística y el sentido dominante de su obra es el par
mundo/tierra.
Fue el filósofo alemán Martin Heidegger quien la introdujo en el centro de
sus fundamentales reflexiones sobre el arte. Para él el arte siempre abre un
mundo sobre una tierra que se resiste y contra la que el mundo se afirma. Igual
que el templo se edifica como un ámbito de sentido sobre la tierra y sobre las
piedras, el espacio y la luz, toda obra de arte está traspasada por esa tensión
entre mundo y tierra, entre significados articulados que se abren en la obra y
su materialidad, su gravedad, su condición histórica y su estofa. Aunque la
antinomia entre el abrirse del mundo y el retroceder de la tierra está presente
en todo arte, las obras de Toni Moranta ejemplifican y exploran esta lucha como
pocas obras contemporáneas lo hacen.
Gestos
5. 2007 Hierro oxidado, resistencia eléctrica, luz, calor, listón de madera de haya,
madera pintada, mecanismos eléctricos. 40x80x15 cm
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La obra de Moranta está dominada por esos elementos materiales, por una fýsis, que gravitan en torno a la
tierra: el calor, la ceniza, la luz, el hierro, la madera, el movimiento, el
vidrio, el paisaje, los olores. Sobre estas estofas y elementos Moranta
articula un mundo de significados, nos abre a sentidos tanto exotéricos como
íntimos, tanto públicos como privados, en los que el concepto, la idea, como
Jacob con el Ángel, lucha a brazo
partido con la materia para abrir un espacio de sentido que debe constituirse
en el diálogo a tres bandas entre el artista, la obra y el público.
En la obra
de Moranta su diálogo transcurre las más de las veces, y paradójicamente, en el
silencio, en la penumbra, en la intimidad donde se producen las descargas de la
memoria provocadas por los sentidos –un olor, el calor, el movimiento del aire
caliente, la textura de un material natural-. En ese diálogo se cruza la
biografía, la crítica cultural, la ironía existencial y la reflexión
filosófica. Una obra es una construcción del mundo a partir de la fragmentación
y el caos, escribe Moranta. Es más, su mundo logra no sólo articular sentidos
cercanos y locales sino que, por decirlo con la divisa de una de sus
exposiciones individuales, se abre como una “fantasía ecuménica” que apunta con
fuerza más allá de lo anecdótico y lo cotidiano. La fuerza del arte de Moranta,
la fuerza de su razón, es una verdad que se nos ofrece, abierta, a todos como
una impagable donación.
Gerard Vilar
Catedrático de Estética y Teoría de las Artes
Departamento de Filosofía
Universidad Autónoma de Barcelona
Bellaterra, junio de 2003
Una de las obras más sutiles es la instalación Dibuj(a)ire de 2006. En ella, el artista
coloca una resistencia en el suelo y una proyección de luz blanca sobre la
pared y, de repente, nos hace visible el aire, el aire convertido en dibujo
efímero. Capta los movimientos sensuales y los remolinos, aquellos que siempre
son iguales y siempre diferentes, el aire caliente que desprende la resistencia
con su color tan característico y que asciende como residuo de combustión, como
un breve trazo fortuito y etéreo.
Jaume Reus
Doctor en Historia del Arte
Universidad de las Islas Baleares
Fragmento extraído del artículo Sombras de aire caliente
Julio 2010
Julio 2010
Gestos
2. 2003 Hierro galvanizado, resistencia eléctrica, luz, calor, listones de madera de haya,
madera pintada, mecanismos eléctricos. 120x200x30’5 cm
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Gestos
3. 2006 Hierro galvanizado, resistencia eléctrica, luz, calor, listones de madera de haya,
madera pintada, mecanismos eléctricos. 120x200x34 cm
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Gestos 2. 2003. Gestos 3. 2006 Vista general de la exposición Mundo-Tierra en la Galería Fidel Balaguer |
Gestos
4. 2006 Hierro oxidado, hierro galvanizado, resistencia eléctrica, luz, calor,
listones de madera de haya, madera pintada, mecanismos
eléctricos
200x120x27 cm |
Gestos
6. 2007 Hierro oxidado, resistencia eléctrica, luz, calor, listón de madera de haya,
madera pintada, mecanismos eléctricos. 40x80x14 cm
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Gestos
8. 2008 Hierros oxidados, resistencia eléctrica, luz, calor, listones de madera de haya,
madera pintada, mecanismos eléctricos. 40x80x25’5 cm
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Hoguera 3. 2006. Gestos 5. 2007. Gestos 6. 2007. Gestos 4. 2006. Banco Asimétricas. 2008. Vista general de la exposición Mundo-Tierra en la Galería Fidel Balaguer |
Gestos 7. 2008 Hierros oxidados, resistencia eléctrica, luz, calor, alambre de acero, madera pintada, mecanismos eléctricos. 30x60x19 cm |
Hoguera
3. 2006 Hierros oxidados, fragmentos de libros quemados encontrados,
resistencia eléctrica, mecanismos eléctricos. 100x100x100 cm aproximadamente
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Gestos 7. 2008. Hoguera 3. 2006 Vista general de la exposición Mundo-Tierra en la Galería Fidel Balaguer |
Hoguera
4. 2008 Hierros oxidados, resistencia eléctrica, luz, calor, madera de haya, mecanismos eléctricos 17x56x20 cm
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El texto bajo el título Mundo-Tierra escrito por Gerard Vilar aparece publicado en el catálogo de la exposición Mundo-Tierra llevada a cabo entre diciembre de 2008 y enero de 2009 en la Galería Fidel Balaguer.
El artículo Sombras de aire caliente escrito por Jaume Reus aparece publicado en el libro-catálogo Posidonia, cuatro miradas editado por el Centre d'Art i Paisatge Camp Lledó en julio de 2010 con motivo de la exposición Entropías de Toni Moranta.
Para mas información podéis visitar: http://www.camplledo.com/index.html
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